He aprendido que las lecturas conjuntas, es la mejor forma de salir de tu zona de confort, y sobre todo encontrar joyas como esta. Tuve el placer de conocer a las autoras de este libro, y poder compartir con ellas cada una de mis reacciones a los regalos que nos tenían esperados entre sus paginas.

Que gustazo da encontrar un libro que te haga leer las ultimas 200 páginas prácticamente del tirón, si señor.
Pese a mi amor/odio por la protagonista, Vyx, no he podido menos que sorprenderme en los giros que nos iba presentando dicho personaje. Miles de teorías en las que terminaba o no, teniendo razón, me hacía querer avanzar, prometido.

Es una historia divertida, y triste al mismo tiempo, en el que vas a tener que vivir el duelo que tiene Vyx por la pérdida de su hermana, y como tiene que enfrentarse a ello día a día. Como comete errores y como aprende de ellos.

Por último, y no menos importante… ¡todos queremos un gatito travieso!

Ahí va mi mini reseña sin spoilers de esta MAGNÍFICA obra:
Vyx y Rose son inseparables. Son dos hermanas mellizas que por cosas de la vida han acabado en la Orden de Artemisa como guerreras arktoi (que por si no lo sabéis, como me pasaba a mí, significa “oso”). Vyx y Rose son adorables y se quieren con el más puro amor fraternal. Pero puede y solo puede que los Doce (los Olímpicos, ya sabéis) tengan otros planes para ellas.
En una misión, algo pasa con Rose y Vyx acaba sola en este mundo dejado de la mano de los dioses. ¿Qué pasa? Rose muere. Vyx, entra en modo depresión, como es lógico y se aleja aun más de todo aquello en lo que no quería creer, de toda esa gente que no son quien ella necesita y se encierra en sí misma, en un modo de autodestrucción total y absoluto. Está dispuesta a lo que sea por recuperar a su hermana, incluso a violar las leyes, como es lógico. Es por esto que va llevando a cabo su propia misión mientras ante sus ojos pasan cosas que hacen que su pequeño y gris mundo se venga abajo. Y es que la Orden de Artemisa no es que sea, ni de lejos, lo más popular, ni lo más aclamado por el resto de seres sobrenaturales de la vida.
Y hasta aquí voy a leer (que no dista mucho de su sinopsis, en realidad).
“La voz de Artemisa” supone un viaje acompañando a Vyx en un momento muy duro de su vida. Vyx es un personaje ácido, malafollá y egocéntrico. Un personaje que puede con todo de puertas para fuera… Aunque de puertas para dentro esté destrozada. Todos los que se han sentido rotos alguna vez van a entenderla cuando la lean. La mayor parte de las conversaciones de Vyx consigo misma me han recordado a todos y cada uno de mis comentarios hacia mí misma y eso me ha hecho quererla y adorarla y tener unas ganas locas de abrazarla. Vyx es una representación de todos los momentos en los que algo no sale como debe y te resignas a seguir hasta el cuello de mierda porque no te queda otra. Con una gestión emocional horrorosa digna de cualquier persona que no acepta la realidad. Y verla así tan desvalida, tan imbécil y divertida para disimularlo todo, tan Vyx… Enamora
Porque, digan lo que digan sus comentarios subidos de tono (que son muchos), Vyx enamora y se agarra a tu corazón con la fuerza de una ascendida. Ella, evidentemente no está sola, tiene una serie de personajes secundarios a cual más carismático. Y todos ellos nos enseñan una forma de acceder a aquellos que en un silencio absoluto gritan que los salvemos de sí mismos. Y todos ellos te marcan de una forma y otra en lo más profundo del corazón y te enseñan a ver más allá cuando tú ya no quieres ver (de algunos también os vais a enamorar, os lo digo)
Así que, si queréis leer una obra increíble, preciosa, que te muerde hasta la última fibra (me ha calado muy hondo, sorry not sorry) de fantasía urbana, con personajes LGTB, mitología griega, aventuras, drama y tragedia (¿conoces alguna historia griega que no acabe en tragedia?) leed “La voz de Artemisa”. Merece la pena. Sé, con total seguridad, que es uno de mis mejores libros de este año.

Estoy deseando que salga la segunda parte para poder seguir con esta preciosa bilogía de “La Profecía oculta”
Pd: Por Vyx